Cuando los equipos acostumbran a llevar exactamente los mismos o similares colores en un partido, el aparato visitante tiene que mudar de color. La selección de Inglaterra juega a veces con camisetas rojas incluso cuando no es necesario, puesto que las llevó cuando ganó la Copa Mundial de la FIFA de 1966. Muchos clubes expertos tienen también una h2″tercera equipaciónh2″ que se usa en el momento en que los colores de la primera y la visitante se consideran afines a los del rival.