Me incluyo en el grupo de los que creen que es una maravilla. Schuster y Moby Gil siempre se llevaron de maravilla y la verdad es que eran tal para cual. La última fue conseguida en el año 2016 frente a la Juventus en un empate a uno que se acabaron llevado los ‘rossoneri’ en penaltis. Lástima que toda la inteligencia que tenía la ponía en el terreno de juego, porque fuera de él deja mucho que desear…